Archivos Mensuales: noviembre 2019

HAKUNA, TODOS POR TODOS

Definiría Hakuna como un movimiento cristiano cuyo carisma principal es vivir la fe desde la alegría de un corazón enamorado.

Es el encuentro personal con Dios y la Virgen, a través de la oración, de la música. Es vivir en un TODOS POR TODOS, con donación y servicio a los demás, con la virtud de la sonrisa y la cercanía del abrazo.

Es también parar, pensar, recapacitar, darse cuenta que no estamos en este mundo ni de paso, ni de pasada, sino por algo y para algo, pero sobretodo por Amor. Es un camino que te llama a orientar tu corazón a la Verdad.

Es superar las debilidades humanas sabiendo que con la ayuda de Dios, de ese Dios Padre, Bueno y Misericordioso, todo corazón enfermo puede sanarse.

Es tener conciencia que Dios nos espera, que nos ama hasta la locura, y que nunca es tarde para recomenzar. Es vivir aceptando la realidad, no huir de ella. Es amar hasta cuando se sienten dudas.

En Hakuna he visto ser feliz a la gente haciendo felices a los demás, con detalles, con gestos, con abrazos, con escucha activa, con sacrificio, pero siempre con un denominador común, el amor.

Un lugar donde jamás se juzga.

Hakuna tiene muchos tipos de actividades, de viajes, de eventos, para todas las edades, todas las sensibilidades, es un lugar con los brazos abiertos donde tiene cabida todo el mundo.

Es saber mirar a los ojos, es aprender a querer al que no es como tú, es en definitiva, un camino que te ayuda a poner en orden las prioridades en esta vida.

Hakuna es un nuevo carisma, en continua evolución, pero con un fin claro: vivir una vida orientada al bien y ser testigos valientes de la alegría de ser cristianos. Es una caricia al corazón.

Una nueva manera de encontrarse con Jesús desde el tú a TÚ.

A vosotros que habéis llegado hasta aquí, solo puedo deciros:

La vida no es fácil, pero si maravillosa. Siempre habrán elementos para tirar la toalla, para rendirse, humanamente inexplicables…

Solo te pido que seas valiente y que esta vez, añadas a tu ecuación, a tu equipo, una pequeña mirada al Cielo, independientemente que tengas mucha, poca o ninguna Fe.

Es tomar una decisión y ponerse a bailar de la mano de Dios, y si es en comunidad mejor. Si no sabes bailar solo necesitas mostrar interés. Dios y la Virgen se encargarán de hacer vibrar y bailar a tu corazón. ¡Confía!

Para que conozcáis más: https://behakuna.com/

Javier Pacheco Doria